La manera de comunicarnos e interactuar entre nosotros ha experimentado un cambio nunca antes visto gracias a la irrupción del mundo digital. En un abrir y cerrar de ojos, Internet nos ha permitido superar todas aquellas fronteras que nos impone el mundo real. Ya no necesitamos concertar una cita o reunirnos con otra persona en un lugar determinado para comunicarnos con ella. Lo mismo sucede con el sexo. Ahora cualquier individuo puede conversar y tener relaciones sexuales – si bien, sin contacto físico- con cualquier persona, siempre que disponga de un ordenador o teléfono móvil con conexión a Internet. La tecnología streaming nos da la posibilidad de intercambiar mensajes, imágenes, videos e, incluso, dialogar en directo con quien y cuando queramos. ¡Maravillo!, ¿verdad? Como cabía esperar, la apertura de estos nuevos horizontes también ha sido aplicada a todo lo que concierne la industria adulta.
El desarrollo del ciberespacio ha cambiado por completo la forma en la que vemos contenidos XXX. Durante los años ochenta y noventa del siglo pasado, lo habitual era ver pornografía a través de los icónicos vídeos VHS o los canales de pago. Con la llegada del siglo XXI y la incursión de Internet en los hogares, comenzaron a surgir cientos de páginas web donde el usuario podía ver porno desde su computadora. No obstante, se trataba de los mismos contenidos elaborados en los estudios profesionales: pornografía tradicional de toda la vida. Estos sitios web con vídeos XXX han ido dejando paso a otro tipo de producto mucho más interesante para el público: las célebres webcams de sexo en vivo. Al fin y al cabo, se trataba de páginas donde uno solamente podía ver las tradicionales películas – o fragmentos de estas- para adultos, caracterizadas por ser un producto repetitivo y guionizado. Aunque todavía hay muchas personas que consumen pornografía en los portales con vídeos XXX convencionales, lo cierto es que no dejan de ser un mero actor secundario dentro de toda la demanda que tiene la industria relacionada con el porno.
En la actualidad, por el contrario, la mayoría del público adulto prefiere consumir los denominados videochats porno. De hecho, en España, Gran Bretaña o Estados Unidos, este tipo de plataformas de sexo en directo han arrebatado todo el protagonismo a la pornografía de toda la vida. Y es que, nuestra manera de percibir los estímulos del exterior ha evolucionado mucho a lo largo de los últimos veinte años. Lo que a nuestros padres les podía parecer estimulante y atractivo a nosotros no lo es tanto. El público, en general, lo que ahora más demanda es el sexo por webcam con chicas desconocidas en lugar del porno convencional. Pero, ¿qué tiene este producto para adultos que lo hace tan atractivas a ojos de la mayoría? A continuación, repasaremos algunas de las fascinantes cualidades que tiene este novedoso producto para adultos.
Todo gira alrededor del usuario
Al igual que el cine convencional, el porno elaborado en estudios es un producto para ser visualizado por el espectador. Por el contrario, las webcams de sexo en vivo también nos dan la oportunidad de involucrarnos directamente con todo lo que sucede frente a la pantalla del dispositivo y, además, en tiempo real. En los videochats porno el usuario puede ser tanto un mero espectador como el protagonista de la historia. Desde observar cómo las modelos se masturban hasta conversar con ellas acerca de cualquier fantasía erótica, el cliente es quien siempre tienen la última palabra. Todo está enfocado en hacer que él sea el personaje principal del relato. Obviamente, tener la ocasión de ser los directores de nuestra propia película para adultos, así como el protagonista de ella, hacen de este novedoso producto pornográfico algo con lo que ningún otro puede competir.
Un producto más atractivo
La llegada al mundo digital de los chats porno ha supuesto una verdadera revolución dentro del seno de la industria adulta. Nunca antes en la historia de este sector, el cliente o usuario ha tenido la oportunidad de disfrutar de tanta cantidad y variedad de contenidos XXX. Además, estas plataformas son realmente cómodas, sencillas y divertidas a la hora de emplearlas. Se trata de sitios web que disponen de los últimos avances en cuanto a tecnología y diseño: interfaces intuitivas, contenidos bien organizados (nacionalidades, orientaciones sexuales, atributos físicos, edades, preferencias...), cámaras en HD, audio de alta calidad, rápida conexión a Internet... Por no hablar de que todas las plataformas de webcams de sexo en vivo operan las 24 horas del día, durante los 7 días de la semana. Todo este cúmulo de factores hacen de este producto algo realmente cautivador para el público.
Placer al instante o prolongado
Puede que se de el caso, sin embargo, raramente los orgasmos que consigue el espectador viendo porno convencional son comparables con los de los videochats porno. Ya lo hemos dicho: ver siempre contenidos similares y repetitivos resulta contraproducente. Al final, el usuario termina por cansarse y aburrirse. Obviamente, esto repercute en la calidad de sus orgasmos. Por suerte, esto que suele darse con la pornografía tradicional no sucede en las salas de webcam. El cliente de los videochats XXX tiene la posibilidad de escoger dos variantes de contenidos muy satisfactorias. La primera se refiere a la búsqueda de chicas webcam lista para la acción. Es decir, interactuar directamente con una modelo excitada y preparada para hacerlo eyacular sin tener que “comerse la cabeza”. La otra variante más común es la que tiene que ver con el acceso a salas donde lo primero son las conversaciones, los preliminares, las fantasías..., para después, entrar de lleno en la materia... ¡Espectáculos de sexo en vivo que pueden durar horas!
Lo que vemos es lo que realmente está sucediendo
En las webcams de sexo en vivo encontraremos tanto modelos profesionales como amateurs. Sea cual sea nuestra elección, de lo que tenemos que estar seguros es de que todo lo que ocurra frente a la webcam es totalmente cierto. Las modelos por webcam son chicas honestas, mujeres que hacen esto porque les apasiona el sexo. Quieres satisfacer las necesidades de sus clientes al mismo tiempo que cumplen las suyas propias. Su motivación es el sexo, no el dinero. Por lo tanto, no tienen la necesidad de fingir. Todo les sale de dentro... De esta manera, los usuarios y las modelos de cámara establecen un vínculo erótico cautivador y estimulante.
Disponibilidad de modelos de todo el mundo
Otra de las ventajas del sexo en vivo es la gran cantidad de chicas con distintas nacionalidades que podemos conocer. En el cine porno la mayor parte de las actrices provienen de Estados Unidos, Francia, Italia, Gran Bretaña o Colombia. Sin embargo, en las webcams porno tenemos la oportunidad de interactuar con mujeres de lugares mucho más exóticos: Japón, Filipinas, Marruecos, Israel, Finlandia, México, Bielorrusia... Por supuesto, ni que decir tiene que este servicio para adultos también dispone de una amplia variedad de modelos autóctonas. Chicas españolas por webcam de Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia, Tenerife...
Además de lo mencionado más arriba, las webcams XXX incluyen otros beneficios para el espectador. Entre los más destacados podemos nombrar: aprendizaje de nuevas técnicas eróticas, desarrollo de la imaginación, apoyo emocional o riesgo cero de contraer enfermedades de transmisión sexual. Por todo lo que acabamos de leer en este artículo, no cabe la menor duda de que estamos ante el producto que más ha revolucionado la industria adulta a lo largo de su historia.