Esta joven actriz, nacida en Rio de Janeiro, ha protagonizado cientos de películas porno, y a pesar de su corta edad, ya estuvo casada y se divorció de su marido hace tres años. Lo que más llamó la atención fue que lo hizo para comenzar una relación con otra mujer.
Esta semana ha declarado en el programa de televisión para adultos Pornoladina, que conduce la presentadora de televisión Nicole Puzzi, que “Dios no tiene problemas con su trabajo porque ve lo bueno en su corazón”. La joven asegura que “Dios ve el interior de nuestros corazones. Juzga lo bueno y lo malo que haces, y yo hago cosas buenas por la gente. Soy una buena persona de corazón y eso es lo que importa”.
Como era de esperar, la comunidad religiosa brasileña ha enfurecido al conocer estas declaraciones, y según informa The Sun, estas personas están criticándole en sus redes sociales diciéndole que “va a arder en el infierno”.
La presentadora, Nicole Puzzi, le preguntó que cómo podía compaginar su fe con su profesión, y ella contó que “la gente cree que una actriz porno no puede ser evangélica o creer en Dios. Además, todos son muy criticos y no estoy de acuerdo con ellos”.
Esta actriz se ha criado en una familia profundamente religiosa, la cual le transmitió toda esta pasión por el evangelismo, a pesar de que se fuera de casa a los 15 años por problemas que desconocemos.
Ella asegura que no sabe si su familia conocerá a qué se dedica o qué pensará sobre ello, pero no tendría ningún problema en que se enterara de cual es su trabajo actual. No se lo ha dicho ya que piensa que se lo tomarían bastante mal y no les gustaría. Lo que si saben y conocen es la separación que tuvo con su expareja, lo cual lo calificaron como una “etapa que está en contra de sus creencias”.
La actriz en su vida diaria se dedica a subir fotos en bikini o con poca ropa a Instagram para que las puedan ver sus seguidores más fieles.